Esta nueva era, con tantos cambios y posibilidades tecnológicas, ha traído consigo unos procesos que han beneficiado enormemente a la sociedad, permitiéndoles a los individuos convertirse en sujetos de un colectivo y/o comunidad que les permite generar cambios en ellos y en el entorno que los rodea; las Tecnologías de la Información y la Comunicación acentuaron más esta posibilidad de asociación al dejar de lado la barrera espacio-tiempo, factor fundamental para el encuentro con el otro, además de hacer “tangible” el ideal de Aldea Global.
Las comunidades virtuales, como una de los fenómenos surgidos de este advenimiento de las TIC, permiten la colectivización, en este caso, las comunidades virtuales como conjuntos de personas alrededor de un interés común, que permite la interacción con otros individuos y de esta manera la construcción y generación de nuevo conocimiento; en dichas comunidades es posible suscitar dinámicas de intercambio y retroalimentación, procesos fundamentales para propiciar un aprendizaje significativo y/o unos resultados de calidad en cualquier actividad que como colectividad se pueda dar.
Gracias a las nuevas tecnologías de la Información y la comunicación se hace más sencilla la conformación de este tipo de comunidades, por lo general intelectuales, pues las nuevas tecnologías permiten la socialización sin tener que confluir en un espacio-tiempo específico, sino que en cambio se puede dar una interacción de forma asincrónica, de manera que cada uno de los participantes puedan realizar sus aportes, retroalimentarse de los otros e ir construyendo entre todos según sus intereses y posibilidades. Las TIC en estos espacios cumple dos funciones; como un instrumento para facilitar la comunicación y el intercambio de información y otro como herramienta para promover el aprendizaje.
De esta forma, las comunidades mediadas por las Nuevas Tecnologías de la
Información y la comunicación, son un espacio que ha ido abriéndose paso dentro
del ámbito académico e institucional, para poder generar sinergias y
transformaciones en el área en la cual se esté concentrando la información,
apostarle a las comunidades virtuales como un espacio de trabajo, relación,
colaboración, intercambio y retroalimentación, es apostarle a unas nuevas
formas de construir conocimiento, de generar ideas con el otro, sin estar
ligados a un espacio-tiempo, es la posibilidad de hacer de las ideas un fruto
del día a día.